Bogotá.- Durante la feria F-Air en Colombia, en Rionegro, Antioquia, la empresa estadounidense de tecnología de defensa Shield AI presentó oficialmente su sistema aéreo no tripulado (UAS) V-BAT 128.
La Armada de Colombia está evaluando el sistema para su posible adquisición, con interés en aprovechar sus capacidades autónomas para el conocimiento del dominio marítimo, la vigilancia en la selva y las operaciones antinarcóticos.
El interés de Colombia en adquirir plataformas UAV de última generación como el V-BAT 128 se debe a las persistentes amenazas a la seguridad interna y transnacional. Décadas de conflicto con facciones guerrilleras, como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), junto con la poderosa presencia de redes organizadas de narcotráfico, han creado persistentes desafíos de seguridad en el extenso territorio colombiano.
La presentación marcó la entrada estratégica de Shield AI en los mercados de defensa de Colombia y Latinoamérica en general, a medida que las fuerzas regionales buscan cada vez más sistemas no tripulados con IA para modernizar su estrategia operativa.
El V-BAT 128 es un sistema aéreo no tripulado táctico del Grupo 3, optimizado para ISR expedicionario, guerra electrónica y flexibilidad multimisión. Cuenta con una configuración de cola que permite un despegue y aterrizaje vertical (Vtol), eliminando la necesidad de pistas, rieles de lanzamiento o sistemas de recuperación.
Este diseño permite al V-BAT operar desde cubiertas estrechas a bordo de buques de guerra, terrenos accidentados o estrechos claros de la selva, lo que lo hace altamente adaptable al entorno operativo de Colombia.
Con un peso bruto máximo de despegue (Gtow) de aproximadamente 125 libras (56,7 kilogramos), el V-BAT 128 logra un equilibrio perfecto entre resistencia, capacidad de carga útil y portabilidad.
Impulsado por un motor de pistón monocilíndrico con inyección de combustible, el UAV puede mantener el vuelo hasta 11 horas, dependiendo de la configuración de la carga útil y las condiciones ambientales.
Tiene un alcance de línea de visión de más de 600 kilómetros, con comunicaciones satelitales opcionales (Satcom) que permiten operaciones más allá de la línea de visión (Blos) a distancias estratégicas.
La plataforma admite una capacidad de carga útil de hasta 11,3 kilogramos (25 libras), y su bahía modular alberga una amplia gama de sensores, incluyendo estabilizadores EO/IR de alta resolución, radar de apertura sintética (SAR), imágenes de movimiento de área amplia (Wami), sensores hiperespectrales, kits de inteligencia electrónica (Elint) y sistemas de retransmisión de comunicaciones.
La funcionalidad autónoma del V-BAT 128 se basa en el software Hivemind de Shield AI, un sistema de control de vuelo basado en IA que permite la toma de decisiones autónoma en tiempo real, el enrutamiento de vuelo adaptativo y la ejecución colaborativa de misiones entre múltiples UAV.
A diferencia de las plataformas UAS tradicionales, que dependen en gran medida del control humano en el circuito, Hivemind permite al V-BAT 128 operar con mínima intervención del operador, navegar en entornos sin GPS mediante odometría visual-inercial integrada y ajustar dinámicamente los parámetros de la misión según las condiciones cambiantes del campo de batalla.
Esta autonomía es crucial en zonas de alta amenaza donde la interferencia de la guerra electrónica, el enmascaramiento del terreno o la degradación de los satélites pueden interrumpir las conexiones de control de los UAV convencionales.
Durante la exhibición, representantes de Shield AI destacaron el exitoso historial de despliegue de la plataforma en unidades expedicionarias de la Armada de los E.U., fuerzas de reconocimiento del Cuerpo de Marines de los EE. UU. y el Comando de Operaciones Especiales (Socom).
En estas funciones, el V-BAT 128 ha realizado vigilancia ISR, apoyo de precisión para la localización de blancos, puenteo de comunicaciones y evaluaciones críticas en el campo de batalla. Su robusta estación de control terrestre (GCS), diseñada para una configuración rápida y un uso intuitivo, permite a tripulaciones de dos personas operar el sistema con control total de la carga útil, la explotación de la señal de los sensores en tiempo real y la replanificación de misiones sobre la marcha.
El UAV también cuenta con sistemas tolerantes a fallos y protocolos de seguridad para la recuperación autónoma en caso de pérdida de señal o fallo de algún componente.
La evaluación del V-BAT 128 por parte de la Armada de Colombia se alinea con sus esfuerzos actuales por integrar tecnologías de defensa occidentales que potencien la modernización de las fuerzas, mejoren la conciencia multidominio y reduzcan la dependencia de plataformas heredadas.
En 2024, el Ministerio de Defensa de Colombia delineó una doctrina ISR revisada que enfatiza la rápida explotación de inteligencia, la flexibilidad de los recursos de despliegue y la autonomía operativa en zonas de alto riesgo.
La Armada, en particular, busca ampliar su cobertura ISR marítima para operaciones contra el contrabando, monitorear violaciones de la ZEE y apoyar el despliegue de fuerzas anfibias en ríos y costas.
De ser seleccionado, el V-BAT 128 representaría un gran avance en la capacidad de vehículos no tripulados de Colombia, convirtiéndose potencialmente en uno de los UAV operativos más avanzados en servicio en Latinoamérica.
La capacidad del sistema para soportar misiones de ISR, EW, SIGINT, retransmisión de comunicaciones e interdicción marítima en una única plataforma de rápido despliegue lo posiciona como un multiplicador de fuerza tanto en escenarios de conflicto convencionales como asimétricos. Su capacidad Vtol también facilita la integración futura con buques de superficie no tripulados (USV) y centros de comando móviles, expandiendo la red ISR de Colombia a una red de sensores multidominio.
Los corredores clave utilizados por los cárteles de la droga atraviesan la densa selva amazónica, sistemas fluviales remotos y zonas marítimas sin vigilancia, tanto en las regiones del Pacífico como del Caribe. Las plataformas tradicionales de ISR tripuladas enfrentan limitaciones operativas en estas áreas debido al costo, la exposición al riesgo y las restricciones ambientales.
Por lo tanto, la estrategia de defensa de Colombia se ha orientado hacia sistemas no tripulados modulares, mejorados con IA, capaces de ofrecer vigilancia continua, navegación autónoma y cobertura de larga duración con una mínima demanda logística. Los UAV como el V-BAT 128 presentan una solución eficaz para cubrir las deficiencias de ISR en zonas inaccesibles, a la vez que reducen la dependencia de patrullajes con gran demanda de personal.
Según se informa, Shield AI y los funcionarios colombianos de adquisiciones de defensa están en conversaciones sobre una posible serie de pruebas de evaluación y despliegues de campo limitados a partir de finales de 2025.
Estas pruebas podrían incluir el despliegue desde buques patrulleros de alta mar (OPV) de la Armada colombiana, puestos de patrullaje fluvial amazónico y puestos avanzados en la selva. Shield AI ha indicado su disposición a personalizar las cargas útiles y las configuraciones de comunicaciones para cumplir con los perfiles de misión y los requisitos de cumplimiento de Colombia.
Colombia avanza en su giro estratégico hacia sistemas de guerra autónomos; la posible adopción del V-BAT 128 puede marcar un hito significativo en las capacidades aéreas no tripuladas regionales y la creciente influencia de las tecnologías de defensa de IA con sede en E.U. en los programas de modernización de la defensa de América Latina.