Estocolmo. – midsummer AB — ensambladora de celdas solares livianas y maquinaria para la producción de estos dispositivos — creó una filial en Colombia.
Los análisis de mercado, según midsummer AB, muestran que la combinación de precios de la electricidad, radiación solar, incentivos para las energías renovables e incidencia de los techos fotovoltaicos, hacen que su tecnología sea atractiva para clientes residenciales, industriales y comerciales en territorio «cafetero».
Con un peso inferior a tres kilos por metro cuadrado, sus paneles solares, según Midsummer AB, son una alternativa ideal para casas, almacenes y edificios que no pueden soportar soluciones convencionales basadas en silicio.
La compañía sueca estima un potencial de mercado de 21 gigavatios en Colombia.
De acuerdo con midsummer AB, también existe un prometedor número de clientes interesados en sus equipos no solo en Colombia, sino también en otros países latinoamericanos como Perú, Ecuador, República Dominicana, Panamá y México.
Hasta la fecha, añadió midsummer AB, ha realizado en Colombia cuatro ventas confirmadas de 150 kilovatios y prevé cerrar el 2025 con al menos tres instalaciones finalizadas.

Por su parte, el director de midsummer Colombia S.A.S. , Felipe Alberto Corral Montoya, , dijo que para el 2026 contarán con una cartera de proyectos, que se beneficiará de las nuevas instalaciones de producción que se establecerán en el país.
El Grupo Midsummer también cuenta con una filial en Bari, Italia (Midsummer Italy), que es propietaria de la mayor fábrica en Europa de células solares de película delgada.
Negocio de compensación
Tal como reveló Primera Página el pasado 18 de noviembre, midsummer AB también inició negociaciones con su paisana Saab para ampliar capacidad de producción y la construcción de una fábrica de celdas solares en Colombia.

Felipe Alberto Corral Montoya, director de midsummer Colombia S.A.S.
De acuerdo con la información, en noviembre del 2024 las dos empresas escandinavas firmaron un memorando de entendimiento para explorar e identificar posibles actividades de cooperación industrial en los mercados de exportación y centrado en la fabricación y la tecnología de energía solar.
En concreto, según medios suecos, la identificación de Colombia como mercado objetivo, por parte de Midsummer, viene de varias líneas.

Eric Jaremalm, presidente de midsummer AB.
Por un lado, Saab firmó un contrato para proveer a la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) con 17 cazas Gripen EF, con el supuesto objetivo de modernizar su flota de combate.
Una cláusula de ese contrato, de acuerdo con los informativos suecos, es el llamado programa de compensación (offset commitment), que incluye componente social y transferencia tecnológica.
Y fue en ese marco donde se sumó, según analistas, el memorando de entendimiento de Midsummer con Saab para la construcción de una fábrica de células solares en Colombia.
De hecho, en otro comunicado dado a conocer a la opinión pública se menciona que ello se vincula con las operaciones de defensa y seguridad que Saab lleva a cabo y con la política colombiana de cooperación industrial y transferencia de tecnología.
Ya en mayo pasado, según dicha información, Midsummer AB recibió su primer pedido de máquinas por 143 millones de coronas suecas (US$15,1 millones) de Saab, para una fábrica de células solares, con una capacidad de producción

